DS 3 Crossback, cinco razones para elegirlo
En medio de un mercado automotor monocromático, de vez en cuando surge un ejemplar que se desmarca del resto y que nos brinda un cierto grado de individualidad. Este es el caso del DS 3 Crossback, una interesante alternativa de la expondremos sus cinco principales atributos.
Por Leonardo Pacheco
Hace poco más de un año llegó a nuestro país el DS 3 Crossback, un crossover compacto provisto de un diseño exterior que no acepta comparaciones, y en el que además se disfruta de un habitáculo de alta costura. Recordemos que en 2014 DS Automobiles se transformó en una marca independiente dentro del grupo PSA, apelativo que tomó del histórico y alabado Citroën DS 19 de 1955.
Volviendo al presente, podemos decir que existen muy buenas razones para adquirir un automóvil, todas válidas sin lugar a dudas, pero cuando el asunto de la movilidad traspasa el simple hecho de ir de un lugar a otro y comienza a importarnos de sobremanera cómo luce ese medio de transporte, una alternativa como el DS 3 Crossback se tornará interesante.
Este ejemplar fue creado no solo para desempeñarse a la perfección, entregarnos una experiencia de manejo impecable y otorgarnos seguridad, porque también en su propuesta está estimularnos el ego y satisfacer una necesidad tan legítima como es la de querer destacar del resto e imponer nuestro propio estilo; casi como una prenda de vestir.
El DS 3 Crossback está disponible con dos niveles de equipamiento, Bastille y Opera, gama en la que se incluyen tres motorizaciones y dos cajas de velocidades; los precios van desde $18.990.000. Hay muy buenas razones para llevarse en DS 3 Crossback a casa, pero estas son las más concluyentes.
1) Si bien es una nueva marca, el ADN de Citroën actúa como aval
DS Automobiles debutó hace seis años como marca, pero en ese tiempo ha sabido ganarse el respeto de los compradores e incluso superar, en varios aspectos, al fabricante que le dio vida. Claro que en sus venas corre la sangre de Citroën, un nombre de gran prestigio y que ya cuenta con más de 100 años de historia.
Citroën es reconocida como una fuente inagotable de soluciones innovadoras y DS viaja por la misma senda, claro que agregándole el toque “chic” que todos esperamos hallar en un automóvil nacido en Francia. Innovación y belleza, dos atributos que están implícitos en el ADN de este hermoso crossover.
2) Tecnología de punta, expresada en motores muy eficientes
Dos plantas motrices conforman el menú técnico de este crossover galo, la premiada planta gasolinera PureTech y un turbodiésel BlueHDi. En la gama PureTech se ofrece una cilindrada de 1.2 litros, con erogues de potencia y torque de 155 CV y 240 Nm, respectivamente. La unidad BlueHDi cubica 1.5 litros y de ella brotan 100 CV y 300 Nm de par.
En lo que se refiere a eficiencia se anuncian cifras extraordinarias, comenzando por el motor PureTech que es capaz de entregarnos 20,1 km/l en carretera, mientras que el impulsor BlueHDi se anota nada menos que 27,3 km/l. Y como broche de oro, destacamos la presencia de una transmisión automática de ocho velocidades en las versiones gasolineras, conjunto que nos permite acelerar de 0 a 100 km/h en 8,2 segundos.
3) La calidad no es solo visual, sino que también palpable
Casi está demás decir que el DS 3 Crossback es uno de los ejemplares más estilizados que se ofrecen en este segmento, y quizás en muchos otros. No obstante, su belleza es un tema secundario frente a la excelente calidad exhibida por este producto en las áreas de materiales y remates finos; por supuesto que el equipamiento no se queda al debe.
Cada detalle del habitáculo está muy bien logrado, siendo la prolijidad de las conexiones entre polímeros uno de los puntos que más nos agradan; es obra de artesanos muy hábiles. Destacamos lo bien que convive la modernidad con el clasicismo, una simbiosis que en contadas ocasiones da buen resultado… y en este caso sí lo hizo.
4) La relación costo vs beneficio es muy conveniente
Para acceder a un DS 3 Crossback hay que desembolsar desde 18,9 millones de pesos, una cifra que resulta conveniente cuando comenzamos a sopesar lo que nos estamos llevando a cambio de ese monto. Está claro que este DS no es para iniciados ni compradores pragmáticos que prefieren ahorrar en lugar de darse un gusto, y aun así la calidad de este producto es tan elevada que al final del proceso de compra este automóvil nos hará sentir que hemos tomado la mejor de las decisiones; en palabras simples, el DS 3 Crossback vale cada peso que pagamos por él.
5) La marca posee una extensa red en nuestro país
DS no es un fabricante iniciado ni que esté experimentando en mercados emergentes como el nuestro, sino que forma parte de una enorme red mundial, una extensión de Citroën que por supuesto aprovecha la infraestructura de su marca madre.
En nuestro país la red de ventas y servicio técnico está consolidada, mediante establecimientos propios y también apoyándose en el trabajo de concesionarios de impecable trayectoria. En términos de confianza DS ya superó la prueba, y su presencia a nivel nacional seguirá creciendo cada día.
