Subaru WRX, alta performance bajo control
La quinta generación del Subaru WRX, debutó hace algunos meses en nuestro país con un nuevo motor Boxer turbo de inyección directa de 2.4 litros. Quisimos poner a prueba su performance y seguridad para lo cual realizamos una serie de maniobras en pista tanto a la versión sport wagon como al sedán.
El WRX es un modelo icónico de la marca japonesa y con los años se ha convertido en un gran referente de la deportividad. En esta quinta generación vemos la evolución de casi tres décadas y no caben dudas que este modelo es un digno exponente de su árbol genealógico, pues ha heredado los rasgos característicos de sus antepasados, tales como esa toma de aire ubicada en el capó, los laterales angulosos y la proa extendida.

Pero dentro de esta actualización del deportivo de Subaru, además del diseño, dos de los puntos fuertes son la seguridad y la tecnología, por lo que quisimos someterlo a diversas pruebas en pista para comprobar qué tal se comportaba y realizar un viaje fuera de Santiago, para evaluar su comodidad de marcha, conectividad y asistencias a la conducción.
Comportamiento ejemplar

La primera jornada de pruebas dinámicas las realizamos en el Centro de manejo deportivo Las Vizcachas, donde probamos la suspensión del WRX, sus frenos, estabilidad, capacidad de agarre y tracción para ver cómo es el comportamiento de este auto en una situación de emergencia.
Para la evaluación lo hicimos en la versión sedán y la sport wagon, ambas equipadas con un motor turbo bóxer gasolinero de 2,4 litros que produce 275 CV a 5.600 rpm y un par máximo de 350 Nm desde las 2.000 vueltas por minuto.

Para la versión sedán el citado bloque está unido a una transmisión mecánica de 6 velocidades y para la sport wagon a una transmisión Lineartronic CVT, conjunto con sensación de ocho velocidades y que se puede operar manualmente con la misma palanca y también con las levas ubicadas detrás del volante.
Partimos realizando la prueba de slalom, cuyo objetivo es ver cómo reacciona el auto ante los cambios bruscos de dirección.
Claramente esta prueba fue pan comido para estos Subaru, teniendo en cuenta la enorme batería de elementos de seguridad pasiva y activa que ofrecen.

La segunda prueba fue la de frenado, para revisar cómo se comporta este WRX ante una frenada de pánico, por ejemplo, cuando alguien se cruza un semáforo en rojo, cuando vemos un obstáculo en el camino o porque el auto de adelante frenó inesperadamente. Para ello hicimos el ejercicio de frenando de 50 km/h a cero; luego 100 km/h a cero y finalmente 120 km/h a cero, que son las velocidades existentes en nuestra normativa de tránsito.
Para la frenada de 50 y 100 km/h el ejercicio fue muy sencillo y ya en el frenado de 120 vimos la mordida del freno un poco más larga, pero aun así quedamos dentro del área de seguridad.

Finalmente, realizamos una maniobra de esquiva, que tiene el objetivo de ver cómo se comporta el auto ante un cambio de trayectoria inminente a velocidad y notar qué tan bueno es o no el funcionamiento del control de tracción y de estabilidad. Para este caso, la tracción del WRX es integral, recurso mecánico que forma parte de la arquitectura Symmetrical All Wheel Drive y que tras realizar esta prueba entendemos por qué es uno de los orgullos técnicos de este fabricante, pues su comportamiento es inmejorable.
Después de una entretenida jornada de pruebas, comprobamos que todas las virtudes declaradas en la ficha técnica de este vehículo funcionan de verdad y que si bien estos ejemplares están hechos para llevarlos al límite, al momento de tener que responder, lo hacen de manera eficaz y contundente.
Comodidad en el manejo y excelente conectividad
Pero las virtudes del WRX no se agotan en la pista, pues al manejar varias horas en una ruta hacia viñedos Puertas en Curicó pudimos comprobar la comodidad en el manejo, al menos en la versión sport wagon que cuenta con una suspensión más trabajada y suave, menos tosca que la del sedán.

Además, la versión sport wagon incorpora el completo sistema de asistencia a la conducción eyesight que agrega control crucero adaptativo, gestión del acelerador previo a la colisión, aviso de arranque del vehículo precedente, dirección de emergencia autónoma, advertencia de salida de carril y corrección del volante, entre otros dispositivos de última generación y que sin duda hacen de nuestro manejo una experiencia más segura y confortable.

Por otro lado, la gran pantalla táctil central de 11,6 pulgadas desde la cual se pueden configurar los sistemas clave como modos de manejo y rigidez de la dirección funcionan de manera muy intuitiva, al igual que la conectividad a Apple CarPlay y Android Auto que sin duda hacen de la conducción una experiencia mucho más agradable al utilizar aplicaciones como waze o Spotify.

En definitiva, tecnología al servicio de la comodidad que hacen de estos ejemplares grandes exponentes del buen manejo.
